Cosas a hacer antes de llegar al aeropuerto
1. Haz el check-in online
Hoy en día, este servicio lo ofrece la práctica totalidad de las aerolíneas de los países desarrollados.
Al realizar el check-in online, si viajas solo con equipaje de mano podrás proceder, nada más llegar al aeropuerto, hacia las puertas de embarque. Para ello, imprime tu tarjeta de embarque en casa o solicita que te envíen el código de barras necesario a tu Smartphone.
2. Elije un buen asiento en el avión
Situarte cerca de las puertas de salida hará que puedas abandonar la nave antes y, si no tienes que recoger tu maleta de la cinta de equipajes, salgas rápidamente por la puerta de salida para disfrutar de tu destino.
3. Asegúrate de tener toda la documentación preparada y en regla
Pasaporte en vigor, carnet de identidad, billete impreso, cartilla de vacunación… Comprueba que tienes todo lo que necesitas para poder pasar los controles de seguridad y embarcar sin ningún problema.
Cualquier pequeño detalle en el que no te hayas fijado puede demorarte en el aeropuerto, llegando incluso a no poder tomar tu vuelo.
4. Intenta que todas tus cosas quepan en una maleta de mano
Para algo pasaste tu juventud practicando con el juego del Tetris. Consigue que todas las cosas que necesitas en tus vacaciones entren en una pequeña maleta de mano– o mochila – y te ahorrarás colas y tiempo desperdiciado en el aeropuerto.
No lleves cosas innecesarias y apriétalo todo un poco. Ya estirarás la ropa cuando llegues al destino.
Cosas a hacer cuando llegas al aeropuerto
5. Deja la maleta en la cola de equipaje
Si a pesar de haberlo intentado, no has conseguido que quepan tus cosas en una sola bolsa de mano y tienes que facturar una maleta en tu viaje, más vale que hayas realizado la facturación online y puedas ir directamente a la cola de equipaje.
Esta cola es considerablemente más rápida que la que utiliza la gente que no ha facturado.
Si no has impreso tu tarjeta de embarque y tampoco la llevas en tu móvil, utiliza las máquinas del aeropuerto – en caso de que tu aerolínea las tenga – para conseguirla.
6. Pon los líquidos en la maleta que vayas a facturar
Si quieres ahorrarte el incordio de tener que sacar los líquidos en el control de metales, lo mejor que puedes hacer es meter todos los envases que los contengan en la maleta que vas a facturar.
7. Prepárate para el control de seguridad
El control de seguridad es una de las cosas más pesadas del paso por un aeropuerto. Con la proliferación de los atentados terroristas, las medidas tomadas son cada vez más estrictas, convirtiéndolos en un dolor de cabeza para muchos.
La mejor forma de pasarlo con cierta rapidez es estar bien preparado. No acudas con varias capas de ropa que te harán quitarte. Pon todas las cosas que tengas en los bolsillos del pantalón en la mochila o en los del abrigo (que tendrás que quitarte y pasar por rayos). Mete los líquidos en bolsas de plástico precintadas y ve sacando el ordenador portátil de su funda cuando aún estés en la cola. Por último, lleva zapatos cómodos que puedas quitarte fácilmente en caso de tener que hacerlo y atento al cinturón.
8. Elige bien la cola en el control de seguridad
Llegas al control de seguridad y ves a una familia en una de las colas. Los niños marean, varias mochilas, los padres llevan botas, cinturones, abrigos y parecen desbordados solo controlando a sus hijos. Huye.
Si has viajado un poco, no te resultará difícil identificar a otros viajeros experimentados. Verás que se van quitando el cinturón, sacando el portátil y demás, en la misma cola. Si no, siempre opta por la fila en la que veas más gente de negocios. Ellos suelen viajar mucho y hacerlo con lo justo. Unos auténticos expertos en cruzar aeropuertos a la velocidad de la luz.
Por otro lado, fíjate también en cuántos agentes de seguridad se encuentran visualizando la pantalla que muestra las imágenes del escáner de la cinta. Si son dos, suele indicar que uno de ellos está en prácticas y la cola avanzará más lentamente.
9. Ten los documentos de viaje controlados y a mano
DNI, pasaporte, tarjeta de embarque… Con tanto ajetreo en los controles, no sería extraño que perdieras alguna de estas cosas. Intenta ser ordenado y tenerlas localizadas en algún lugar del que, además, sea sencillo extraerlas para ser presentadas en los distintos controles en los que te los reclamarán para inspección.
Una buena solución puede ser ponerlos en una pequeña bolsa y llevarla colgada al cuello.
Atento a no dejarlos olvidados en las bandejas del control de metales o tras una breve parada en el aseo o la cafetería. Es algo que ocurre con cierta frecuencia.
Cosas a hacer en el aeropuerto de destino
10. Tener listos los formularios de inmigración
Sí, es una lata tener que hacerlo, pero lo suyo es rellenar el formulario de inmigración mientras estás volando. Así, al llegar será todo más rápido. Llévate un bolígrafo y aprovecha el vuelo para adelantar trabajo.
11. Dar buena imagen a los agentes de inmigración
Mantener una actitud desafiante o de hastío, vestir mal o de manera sospechosa… Son cosas que pueden hacer que los agentes de inmigración pongan en ti más atención de la aconsejable. En algunas ocasiones, esto puede conllevar que seas “agraciado” con un interrogatorio “aleatorio”. Una pérdida de tiempo y una situación incómoda. Dos en uno.
12. Tener claro a dónde nos dirigimos
Preparar el viaje es una de las etapas más ilusionantes y bonitas del mismo. Lees información, miras mapas, fotografías e imaginas cómo será encontrarse en el destino elegido. Olores, sensaciones… La maquinaria de los sueños se pone en marcha.
Sin embargo, también hay que tener en cuenta las cosas más prácticas y, por ejemplo, saber cómo tienes que llegar a tu primer destino desde el aeropuerto.
De no ser así, acabarás teniendo que acudir a los mostradores de información, donde puedes encontrarte con largas e incómodas colas.
13. Reservar el transporte con antelación
Si vas a salir del aeropuerto de destino en algún medio de transporte que ya has mirado con antelación, lo mejor es comprar los billetes online. Esto te ahorrará unos minutos, que se vuelven preciosos cuando llegas cansado del viaje.